Si el otro día le tocó al aguacate, hoy vamos a hablar del coco, otra superfruta con propiedades maravillosas.
Del coco podemos diferenciar dos partes aprovechables, una vez descartada la cáscara dura: La pulpa, con su característico color blanco y el agua que tiene en su interior. Por si esto fuera poco, del coco se obtiene azúcar, aceite y manteca.
Agua de Coco
El agua de los cocos tiene multitud de nutrientes:
- Rica en cobre, zinc, hierro, magnesio, fósforo y potasio.
- Contiene elevados niveles de Vitamina A, Vitamina E y vitaminas del grupo B, especialmente ácido fólico.
- Rica en fibra.
El agua de coco está indicada en casos de problemas intestinales y gástricos, como estreñimiento y ulceras gástricas.
Fortalece huesos, uñas y dientes.
Pulpa del Coco
La pulpa del coco, si no la obtenemos directamente de la fruta fresca, suele comercializarse en forma de coco rallado.
- Rico en fibra, hierro, potasio, calcio, fosforo y magnesio.
- Alto contenido en Vitamina E.
También se comercializa en polvo, para elaborar leche de coco.
Azúcar de Coco
El azúcar del coco se extrae del néctar de las flores de la palmera cocotera. No solo tiene un sabor acaramelado y esquisto sino que ademas es de los azucares mas sanos para nuestro organismo pues esta cargado de nutrientes y ademas tiene un bajo indice glucémico (35).
No solo endulza nuestros platos, sino que también nutre, aportando hierro, magnesio, zinc, potasio, y vitaminas del grupo B.
Aceite de Coco
El aceite de coco orgánico, obtenido por presión en frío tiene unas propiedades excepcionales.
- Aporta energía.
- Es bueno para piel y cabello.
- Pese a ser un aceite rico en grasas saturadas es bajo en colesterol.
- Ayuda al sistema inmune.
- Previene enfermedades cardíacas
- Los altos niveles de ácidos laurico, caprico y caprílico hacen que sea un potente antioxidante y ayude contra hongos, bacterias y microbios.
- Ayuda en las digestiones.
- Recomendado en personas hipertensas, diabéticos, en problemas renales.
- Fortalece los huesos.
Manteca de Coco
La manteca de coco se consigue triturando la pulpa del coco. Tiene todas las propiedades del aceite de coco, simplemente no se prensa para separar la pulpa del aceite.